La plantilla del Levante va más en serio que nunca. La mitad del equipo lleva dos años sin cobrar, les han embargado casas, coches, muchos han tenido que pedir dinero a sus padres para poder comer o llevar al médico a sus críos. El Consejo de Administración, por enésima vez, les pidió tiempo y han decidido plantarse si, antes de las 15:30 horas de este domingo, cuando tienen que enfrentarse al Recreativo de Huelva, no tienen garantías de que van a cobrar el 100% de lo que se les debe, que son 18 millones de euros. "¿Por qué vamos a la huelga? Hemos querido hacer algo legal que permitiera que todo el mundo supiera el alcance del problema. La AFE nos ha dado asesoramiento y ahora ya vamos con todas las de la Ley", indicó Rubiales.
La plantilla granota está convencida de que les asiste la fuerza de la razón. "El sentir del fútbol español es estar con el que tiene la razón y esos somos nosotros. Me duele que se hable de adulteración, ¡lo que se está adulterando es nuestro día a día!", decía el capitán Iñaki Descarga. "Nos llaman compañeros de toda España preguntándonos cómo hemos podido aguantar tanto tiempo sin hacer nada", agregó el lateral.
En cuanto a las negociaciones entre el Levante y el Ayuntamiento, ayer se avanzó bastante y el consistorio tendrá redactado entre hoy y mañana un documento en el que asegurará a los jugadores que van a poder cobrar. El problema son las cantidades que maneja el gobierno municipal y las cifras que desea el club, que acudió a la reunión del pasado martes con los concejales, con un banco (BANIF) y tres opciones: 12, 18 y 25 millones. El ejecutivo de Rita Barberá, por su parte, está dispuesto a garantizar a toda la plantilla el cobro de unos seis o siete millones, que es lo que ya le pidieron en marzo.
El Ayuntamiento quiere abrir una cuenta de crédito por esa cantidad, es decir, que quiere controlar a dónde va dirigido el dinero. En enero ya avaló cuatro millones que, finalmente, no fueron destinados en su totalidad a pagar a los empleados endeudados.
La plantilla granota está convencida de que les asiste la fuerza de la razón. "El sentir del fútbol español es estar con el que tiene la razón y esos somos nosotros. Me duele que se hable de adulteración, ¡lo que se está adulterando es nuestro día a día!", decía el capitán Iñaki Descarga. "Nos llaman compañeros de toda España preguntándonos cómo hemos podido aguantar tanto tiempo sin hacer nada", agregó el lateral.
En cuanto a las negociaciones entre el Levante y el Ayuntamiento, ayer se avanzó bastante y el consistorio tendrá redactado entre hoy y mañana un documento en el que asegurará a los jugadores que van a poder cobrar. El problema son las cantidades que maneja el gobierno municipal y las cifras que desea el club, que acudió a la reunión del pasado martes con los concejales, con un banco (BANIF) y tres opciones: 12, 18 y 25 millones. El ejecutivo de Rita Barberá, por su parte, está dispuesto a garantizar a toda la plantilla el cobro de unos seis o siete millones, que es lo que ya le pidieron en marzo.
El Ayuntamiento quiere abrir una cuenta de crédito por esa cantidad, es decir, que quiere controlar a dónde va dirigido el dinero. En enero ya avaló cuatro millones que, finalmente, no fueron destinados en su totalidad a pagar a los empleados endeudados.
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