8 may (EFE)- El Parlamento Europeo se pronunció hoy en contra del proyecto de la FIFA de obligar a los equipos a alinear al menos a seis futbolistas susceptibles de ser seleccionados en el país de origen del club, iniciativa conocida como la regla "6+5".
La propuesta, promovida por el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, y que podría acotar la presencia casi ilimitada de jugadores extranjeros en las ligas europeas, será debatida en el congreso que el máximo organismo del fútbol mundial celebrará en Sydney (Australia) los próximos 29 y 30 de mayo.
La Eurocámara expresó hoy su oposición al pedir en un informe sobre política deportiva que los Estados y organizaciones deportivas "no introduzcan nuevas normas que creen una discriminación directa basada en la nacionalidad" y citar específicamente la norma "6+5".
Los eurodiputados manifiestan su preferencia por las medidas barajadas por la UEFA, la asociación de federaciones europeas, para promover el uso de jugadores de la cantera, un proyecto que juzga "más proporcionado y no discriminatorio".
El informe del Parlamento Europeo, aprobado por una muy holgada mayoría (518 votos a favor, 49 en contra y 9 abstenciones), tiene valor de recomendación jurídica pero no es jurídicamente vinculante.
Durante los últimos meses, Blatter ha defendido la independencia del fútbol para autorregularse y fijar una norma que podría chocar con la llamada 'ley Bosman', por la que se liberalizaron los fichajes de jugadores comunitarios en cumplimiento de las principios de libre circulación y establecimiento consagrados por la UE.
El liberal holandés Wilfred Manders, uno de los parlamentarios que ha participado en el informe, advirtió hoy de que la iniciativa de Blatter podría crear una situación de incertidumbre jurídica.
"Es indiscutible que la legislación europea no acepta la discriminación por nacionalidad", explicó Manders.
"Si un club decide denunciar (la regla del "6+5") ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, será el caos", alertó- Por otra parte, la Eurocámara vuelve a abogar en el informe por que la venta de derechos de retransmisión televisiva, una de las principales fuentes de financiación de los clubes, se haga de forma "centralizada", para que los equipos más prestigiosos no puedan negociar individualmente condiciones más ventajosas que el resto.
En el debate previo a la votación, el laborista británico Richard Corbett, citó como mal ejemplo la Liga española, donde, según subrayó, "hay dos equipos que se quedan con la mayoría de los ingresos", en alusión al Real Madrid y al Fútbol Club Barcelona.
El Parlamento sugiere a la Comisión Europea que, para favorecer la venta colectiva de derechos, conceda al deporte una exención específica al cumplimiento de las reglas de competencia.
El texto respalda también la decisión de algunos Estados miembros de establecer una lista de acontecimientos de interés que deberían difundirse en abierto en televisión y condena los recursos judiciales de la FIFA al respecto, si bien reconoce el derecho a la propiedad intelectual del sector deportivos.
Los eurodiputados reclaman, asimismo, a la UEFA y la FIFA que acepten en sus estatutos el derecho de recurso a los tribunales ordinarios, si bien admiten que el modelo de deporte europeo se fundamenta en el "principio de autorregulación".
El informe parlamentario, redactado por el conservador griego Manolis Mavrommatis, responde al Libro Blanco sobre el Deporte presentado por la Comisión Europea y no se ciñe al fútbol, sino que contiene recomendaciones para la política deportiva en general.
Entre otras cuestiones, aboga por aumentar la transparencia financiera en los traspasos, reconocer el derecho de los deportistas a sindicarse, adoptar leyes a nivel europeo contra el dopaje o aumentar la cobertura mediática del deporte femenino.
La propuesta, promovida por el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, y que podría acotar la presencia casi ilimitada de jugadores extranjeros en las ligas europeas, será debatida en el congreso que el máximo organismo del fútbol mundial celebrará en Sydney (Australia) los próximos 29 y 30 de mayo.
La Eurocámara expresó hoy su oposición al pedir en un informe sobre política deportiva que los Estados y organizaciones deportivas "no introduzcan nuevas normas que creen una discriminación directa basada en la nacionalidad" y citar específicamente la norma "6+5".
Los eurodiputados manifiestan su preferencia por las medidas barajadas por la UEFA, la asociación de federaciones europeas, para promover el uso de jugadores de la cantera, un proyecto que juzga "más proporcionado y no discriminatorio".
El informe del Parlamento Europeo, aprobado por una muy holgada mayoría (518 votos a favor, 49 en contra y 9 abstenciones), tiene valor de recomendación jurídica pero no es jurídicamente vinculante.
Durante los últimos meses, Blatter ha defendido la independencia del fútbol para autorregularse y fijar una norma que podría chocar con la llamada 'ley Bosman', por la que se liberalizaron los fichajes de jugadores comunitarios en cumplimiento de las principios de libre circulación y establecimiento consagrados por la UE.
El liberal holandés Wilfred Manders, uno de los parlamentarios que ha participado en el informe, advirtió hoy de que la iniciativa de Blatter podría crear una situación de incertidumbre jurídica.
"Es indiscutible que la legislación europea no acepta la discriminación por nacionalidad", explicó Manders.
"Si un club decide denunciar (la regla del "6+5") ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, será el caos", alertó- Por otra parte, la Eurocámara vuelve a abogar en el informe por que la venta de derechos de retransmisión televisiva, una de las principales fuentes de financiación de los clubes, se haga de forma "centralizada", para que los equipos más prestigiosos no puedan negociar individualmente condiciones más ventajosas que el resto.
En el debate previo a la votación, el laborista británico Richard Corbett, citó como mal ejemplo la Liga española, donde, según subrayó, "hay dos equipos que se quedan con la mayoría de los ingresos", en alusión al Real Madrid y al Fútbol Club Barcelona.
El Parlamento sugiere a la Comisión Europea que, para favorecer la venta colectiva de derechos, conceda al deporte una exención específica al cumplimiento de las reglas de competencia.
El texto respalda también la decisión de algunos Estados miembros de establecer una lista de acontecimientos de interés que deberían difundirse en abierto en televisión y condena los recursos judiciales de la FIFA al respecto, si bien reconoce el derecho a la propiedad intelectual del sector deportivos.
Los eurodiputados reclaman, asimismo, a la UEFA y la FIFA que acepten en sus estatutos el derecho de recurso a los tribunales ordinarios, si bien admiten que el modelo de deporte europeo se fundamenta en el "principio de autorregulación".
El informe parlamentario, redactado por el conservador griego Manolis Mavrommatis, responde al Libro Blanco sobre el Deporte presentado por la Comisión Europea y no se ciñe al fútbol, sino que contiene recomendaciones para la política deportiva en general.
Entre otras cuestiones, aboga por aumentar la transparencia financiera en los traspasos, reconocer el derecho de los deportistas a sindicarse, adoptar leyes a nivel europeo contra el dopaje o aumentar la cobertura mediática del deporte femenino.
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